Para que este confinamiento en casa sea lo más ameno posible os proponemos, este post sobre la vitamina D.

La vitamina D es la única que, además de a través de la comida, podemos sintetizar mediante la luz solar, o lo que es lo mismo, fotosintetizar. La mayoría de las personas pueden cubrir hasta en un 90% sus necesidades por la exposición al sol.

Fuentes de vitamina D

La piel produce este micronutriente gracias a los rayos UVB del sol, pero también podemos obtenerla a través de la alimentación. En ambos casos, para poder funcionar correctamente en el organismo, debe pasar primero por unos retoques en el hígado y en el riñón.
Entre los pocos alimentos que contienen vitamina D encontramos el hígado, los huevos o los pescados azules.

Funciones de la vitamina D

El papel de la vitamina D en la salud ósea es conocido desde hace años. Favorece la absorción del calcio en el intestino y se utiliza para muchos procesos biológicos.
Además, este micronutriente es necesario para el crecimiento y desarrollo de los huesos en los niños. También ayuda, junto al calcio, a reducir la pérdida de mineralización ósea en mujeres posmenopáusicas. La vitamina D también está implicada en otras funciones biológicas. Los músculos, el sistema inmunitario, el metabolismo del fósforo y los dientes son algunas de sus dianas.

Consecuencias de la falta de vitamina D

Los huesos son los principales afectados cuando hay deficiencia de vitamina D. Huesos débiles, dolor óseo y debilidad muscular y osteoporosis en personas mayores.

¿Cuánto sol necesitamos?

Lo ideal es hacer actividades al aire libre en invierno y otoño, ya que la intensidad de la radiación solar es baja y vamos más tapados. Durante ese tiempo, son necesarias varias horas para poder obtener la dosis diaria de vitamina D, por lo que es necesario complementar con alimentos. En verano y primavera basta con tomar el sol en piernas, brazos y cara durante 15 minutos, al menos 3 veces a la semana.
A pesar de los beneficios del sol en la síntesis de vitamina D, los rayos UVB pueden provocar cáncer de piel, por esta razón, debemos tomar muchas precauciones. En verano, incluso en los días nublados, no se debe estar expuesto al sol entre las 12 y las 17 horas. Hay que utilizar factor de protección solar, mínimo del 30, cada 2-3 horas y aplicarlo 30 minutos antes de salir de casa.

¿Y durante el confinamiento?

Uno de los efectos del actual  confinamiento es una drástica disminución del tiempo en el exterior y una menor exposición al sol (el vidrio de la ventana bloquea la radiación UVB). Esto se une a la deficiencia de vitamina D en una buena parte de la población española. Por lo tanto, es importante aprovechar el sol en patios y balcones todos los días, aunque esté nublado. Esto es especialmente importante para personas mayores y niños.
Aumentar el consumo de pescado azul (evitar los que acumulan mercurio) y huevos en detrimento de la carne son recomendaciones adicionales. Si habitualmente son tres raciones por semana para cada uno de estos grupos de alimentos, aumentar a cuatro las de pescado y huevos y bajar la de carne puede ser una ayuda.

FUENTE: https://theconversation.com/