En la piel pueden aparecer diferentes tipos de manchas oscuras. La melanina es la responsable de la coloración de la piel, incluso de las manchas de pigmentación, sin embargo, todas las manchas no son provocadas por los mismos factores.

Las causas más corrientes son:

  • El melasma o cloasma: estos tipos de manchas aparecen en el caso de las mujeres de forma simétrica encima de los labios, de los pómulos y en la base del mentón a partir de los 20 años. Generalmente, son causadas por cambios hormonales y se acentúan por las exposiciones a los rayos UV. Existen también un tipo de melasma o cloasma que aparece solamente en las mujeres embarazadas y en las que toman anticonceptivos u otros medicamentos que ejercen un impacto en el sistema hormonal. En ese caso, lo coloración desaparecerá generalmente una vez termine el embarazo o cuando finalice el tratamiento.
  • La hiperpigmentación debida a la exposición a los rayos UV (también conocida bajo el nombre de manchas de vejez): las células internas de la piel (melanocitos), estimulados por la exposición a los rayos UV, se vuelven hiperactivos, provocan una actividad de la tirosinasa y una superproducción de melanina. Con el tiempo, el fenómeno provoca la aparición de manchas oscuras.
  • La hiperpigmentación causada por cicatrices, dermatitis de contacto u otras irritaciones: como, por ejemplo, una limpieza de la piel demasiado vigorosa, una dermatitis severa o incluso el acné.
  • Las pecas hereditarias: estas pequeñas manchas son genéticas y comienzan a aparecer alrededor de los tres años y, de manera más sensible, durante la pubertad. Después de los 30 años permanecen más o menos estables o se vuelve un poco más claras. Las personas de piel clara, cabellos rojos o rubios y ojos azules tienen más tendencia a tenerlas.

La hiperpigmentación afecta a las personas según su etnia:

  • En las mujeres de tipo caucásico; la hiperpigmentación aparece en las zonas de exposición al sol y en las manchas de envejecimiento, a menudo asociadas con la aparición de las arrugas.
  • En las mujeres de timo afroamericano; la la hiperpigmentación surge a menudo después de cicatrices de acné.
  • En el caso de las mujeres asiáticas; las manchas de envejecimiento aparecen más pronto que en las mujeres de tipo caucásico, pero sin que haya arrugas.
  • Las mujeres hispanas; poseen una gran cantidad de melanina.

Todas estas personas están sujetas a la hiperpigmentación

Lo que se ha observado es que los tipos de piel que, de una forma natural, contienen un alto índice de melanina presentan más riesgos. Pero el desarreglo de la pigmentación puede afectar a todo el mundo, y dependerá del tipo de piel. Por ejemplo, la piel que de una forma natural posee más melanina desarrollará unas manchas oscuras después de irritaciones o de cicatrices. En una piel más clara, las manchas oscuras se formaran después de una exposición al sol. Se ha detectado también que las pieles asiáticas desarrollan manchas más pronto que las de tipo caucásico.

Los tratamientos de la hiperpigmentación

Incluso la comunidad médica reconoce que nos encontramos delante de un auténtico desafío. Uno de los tratamientos más eficaces es la hidroquinona al 4%, que se aplica bajo prescripción facultativa. La otra alternativa es la aplicación local de tratamientos cosméticos que contengan potentes antioxidantes para unificar el color de la piel.

Algunos antioxidantes pueden ofrecer un obstáculo a esta reacción oxidante. En particular, los polifenoles, que están presentes en numerosos extractos a base de plantas; la vitaminas E y C; el ácido ferúlico; los proanthocyanidines y el resveratrol, presentes en el vino; los polifenoles, incluidos en el té verde; y la genisteina, en los granos de soja. Todos han demostrado su eficacia para mejorar las irregularidades de coloración de la piel. Su validez para uniformizar la coloración de la piel rivaliza con la de la hidroquinona al 4%.