Un/a  psicólogo/a es aquel profesional que nos ayuda a modificar nuestra forma de comportarnos, tanto si queremos mejorar nuestra manera de afrontar las cosas como si buscamos eliminar algún problema. Y lo hace en base a los mecanismos humanos de aprendizaje, del funcionamiento fisiológico del ser humano y de los diferentes estudios contrastados que han observado a la persona y desarrollado técnicas específicas para cada variable a modificar.

Es por tanto un experto acerca de cómo y por qué cambian las personas.

Siguiendo las pautas de un/a psicólogo/a nos aseguramos la vía más rápida y directa de modificar lo que nos hace sentirnos mal y mejorar enormemente nuestra calidad de vida.

Acudir a terapia sirve para cambiar un pequeño hábito o para dar solución a un problema grave que nos ha afectado desde hace tiempo, tanto si lo hemos generado nosotros, como si es algo a lo que tenemos que hacer frente.

Ir al psicólogo/a sirve para muchas cosas, sobretodo, para aumentar la fortaleza, la seguridad y confianza en uno mismo. Sirve para aumentar la autoestima, para potenciar las capacidades y los recursos que todos tenemos, para sentirse bien, para mejorar las relaciones con los demás, para aprender a valorarnos y a hacernos valorar por los demás.

Ir al psicólogo/a sirve para disminuir o eliminar la perturbación, la angustia, las sensaciones corporales o los síntomas fisiológicos. Sirve para resolver historias del pasado que nos están afectando en la actualidad, a pesar de que en ocasiones no seamos conscientes de ello. También con ello podemos resolver temas pendientes, elaborar duelos por pérdidas que hemos sufrido, cerrar círculos, sanar heridas y procesar experiencias dolorosas y traumáticas de nuestra historia. Ésta están  muchas veces asociadas al malestar actual,  pensando que esas memorias antiguas estaban dormidas, que ya lo habíamos olvidado o superado o pensemos que no puede ser que el pasado tenga tanta influencia en nuestro presente.

Para que NO es un psicólogo

Algunas de las funciones que la gente comúnmente atribuye a la terapia, están lejos de los objetivos de intervención de un buen psicólogo, ya que de ser así, no es de extrañar que la gente cuestione nuestro papel en la sociedad.

No somos gurús, ni leemos la mente, no somos tus amigos ni tu confidente personal, no somos consejeros, no estamos para echarte un sermón ni tampoco nuestra intervención es un fruto casual, esta basado en un método científico.

No decimos al paciente lo que debe hacer, no le cambiamos, ni le damos la solución a sus problemas, sino que le ofrecemos las herramientas y los recursos para que el paciente pueda cambiar y resolver sus problemas y sus dificultades.

¿Cuando hay que acudir al psicólogo/a?

Cuando una persona valora que no tiene recursos para enfrentarse a las situaciones que le preocupan, cuando percibe que un problema le desborda, cuando tiene dificultades en la comunicación con otras personas, cuando siente que no controla su estado emocional o tiene dificultades para relacionarse, cuando necesita unas pautas de orientación en temas específicos (por ejemplo, educación de sus hijos), cuando necesita desenredar líos de su cabeza es un buen momento para plantearse acudir a la consulta.

ANA CARRASCO SÁNCHEZ

Nº COL. AN07986